El día a día en el negocio de la restauración puede ser una actividad frenética, donde las horas pasan volando entre el bullicio de la cocina, la atención a los clientes y la gestión de un equipo en constante movimiento. Sin embargo, como propietario de un restaurante, la gestión eficiente del tiempo es fundamental para el éxito del negocio y la vida personal. La planificaciónde las jornadas de trabajo, propia y de equipo, se convierte en una herramienta poderosa para optimizar recursos, mejorar la calidad del negocio y aumentar el bienestar personal.
Lograr un equilibrio entre tus responsabilidades laborales y tu vida personal es una tarea compleja que requiere una gestión del tiempo y una planificación de horarios a medida. Te proponemos explorar en profundidad estrategias efectivas para optimizar el horario laboral, con el objetivo de mejorar la productividad sin sacrificar el bienestar personal. A través de consejos prácticos basados en pequeños cambios, buscamos ofrecer puntos claves para que puedas alcanzar una armonía entre tu vida profesional y personal.
La gestión y control del tiempo es una práctica esencial que busca optimizar las horas de trabajo de los empleados, con el fin de aumentar su eficiencia y productividad. Esta optimización no solo beneficia a la empresa mediante la reducción de costes y el incremento de la rentabilidad financiera, sino que también es crucial para una planificación efectiva de los turnos de trabajo y la evaluación del desempeño. Abarca desde el control de asistencia hasta la gestión de tareas diarias, y es relevante tanto para los gerentes como para el personal en general. Una gestión del tiempo eficaz no solo mejora el rendimiento laboral, sino que también puede incrementar la satisfacción personal y abrir oportunidades de crecimiento profesional dentro de la organización y fuera, ya que permite a los empleados maximizar su productividad y lograr los objetivos establecidos por cada individuo.
En contextos de altos picos de trabajo y muchos inputs, como es el sector de la restauración, te encuentras que la jornada está formada por muchos ladrones de tiempo. Los ladrones de tiempo son aquellos actos que reducen al 70% las horas de trabajo y tienen un impacto negativo en la productividad y concentración. Para poder trabajar de manera eficiente y efectiva, es necesario la implementación de una serie de objetivos claros, es decir, saber y definir cuales son tus ladrones de tiempo:
Para poder planificar y estructurar tu día a día, vas a tener que dar visibilidad a todas las tareas. Una vez planteadas y visibles, vas a tener una mayor perspectiva de cómo afrontar y planificar tu día a día. Gracias al punto anterior, con una definición de los objetivos, podrás cualificar por mayor o menor importancia las tareas a realizar.
Para el control diario, es necesario una planificación a largo plazo, en este caso semanal. Con esta planificación podrás plantear los diferentes objetivos de forma viable durante toda tu semana laboral, entendiendo tus capacidades o preferencias. Dándole importancia al flujo de trabajo semanal adecuado.
Dependiendo de la estructuración de tu jornada laboral, podrás determinar cuales son los flujos de trabajo óptimos para el desarrollo competente de tu día a día. Aprende a reconocer tu ritmo de trabajo e identificar los momentos en los que puedes ser más productivo. Incorpora descansos breves pero efectivos para mantener tu mente fresca y evitar el agotamiento.
Una de las partes más importantes es la del cuidado personal. No subestimes la importancia del tiempo personal. Actividades destinadas a uno mismo son cruciales para mantener un alto nivel de bienestar y rendimiento en todas las áreas de tu vida. Generando un impacto indirecto en lo profesional.
Además de lo personal, es muy importante saber cómo ayudar a tus trabajadores para que puedan obtener una mayor productividad individual, la cual generará una productividad grupal a largo plazo.
Determinar de manera óptima cual es el rol de cada trabajador y qué tareas va desarrollar, darle la información necesaria para que sea consciente de que va a tener que realizar durante su jornada laboral y cuál es su principal meta; mostrándole como va ser su flujo de trabajo.
Para poder gestionar esta tarea, puedes utilizar herramientas digitales de planificación o plantillas tradicionales.
Imagina decirle adiós a esos rollos de papel con los horarios escritos a mano. Con softwares tecnológicos como Skello, puedes organizar los turnos de manera mucho más eficiente, ahorrando tiempo y dinero en el proceso, además de alinear a tus equipos en función de sus habilidades y disponibilidades. Es como tener un asistente personal para la gestión de horarios.
Es por eso que es importante distribuir las horas de trabajo de manera equitativa entre todos los empleados. Así nadie se siente dejado de lado y todos tienen la oportunidad de contribuir al éxito del equipo.
¿Sabías que algunos de tus empleados tienen preferencias específicas sobre los días u horarios en los que les gustaría trabajar? Al considerar las necesidades individuales de tu equipo al asignar turnos, no solo demuestras que te importa su bienestar, sino que también aumentas la moral y la satisfacción en el trabajo.
Para finalizar, la comunicación interna es un factor a destacar. La comunicación clara y transparente es clave en cualquier equipo. Asegúrate de informar a tus empleados sobre sus horarios con suficiente antelación y de una manera que sea fácil de entender. Esto evita malentendidos y garantiza que todos estén en la misma línea de objetivos.
